Ema enjugo sus lágrimas como pudo y hundió su boca fuertemente en los labios de Máximo una última vez.
Luego, entre sollozos y empujones corrió sin mirar atrás; cerró la puerta para siempre y sin pensarlo trago la llave de una vez porque sabía que era el único modo de no volver allí nunca más...
Lo que en ese momento no pensó es que llevaría por siempre dentro suyo el recordatorio de aquel amor desdichado...
Al darse cuenta que una vez más al tratar de deshacerse de sus sentimientos por él, solo había logrado hundirlo aún más profundo en su propio cuerpo perdió la razón para siempre...
Dicen que desde aquel viernes 13 se la ha visto vagando por las calles acariciando su vientre dulcemente como si llevará un niño en sus entrañas...
De máximo dicen que encerrado en aquel lejano rincón del olvido fue convirtiéndose lentamente en la sombra de quien fuera alguna vez...
Aseguran algunos que la presencia de su sombra llegan a sentirla como un oscuro abrazo aquellos que han sufrido por amor tan profundamente que se han sentido morir.
Me preguntó si se romperá la maldición y podrán reunirse algúna vez, en algún mundo-tiempo, esas dos almas en pena que una vez parecieron destinadas a estar por siempre juntas?
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