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{TRABAJO X (±AMOR + LOGROS ESPIRITUALES) / (TOLERANCIA + EMPATIA + VALORES HUMANOS)} = FAMILIA REAL
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FAMILIA REAL + {TRABAJO X (±AMOR + LOGROS ESPIRITUALES) / (TOLERANCIA + EMPATIA + VALORES HUMANOS)} + OBJETIVOS CLAROS = (LOGROS SOCIALES REALES Y VALIOSOS + LOGROS ECONÓMICOS SUSTENTABLES)
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FAMILIA REAL + (LOGROS SOCIALES REALES Y VALIOSOS + LOGROS ECONÓMICOS SUSTENTABLES) = CRECIMIENTO REAL
La primer fórmula se lee de la siguiente manera:
Una Familia real es igual al producto de trabajo por la suma del amor dado y recibido (±) y los logros espirituales, sobre un común denominador, resultante de la suma o asociación de tolerancia, empatía y valores humanos.
La segunda fórmula sería:
La suma de logros espirituales y del amor dado y recibido(±), productos del trabajo, sobre una base o común denominador resultante de la suma o asociación de tolerancia, empatía y valores humanos, sumados a el apoyo de una familia real y objetivos claros dan por resultado una suma de Logros sociales reales y valiosos, y logros económicos sustentables.
La tercer fórmula se desprende de las dos anteriores y sería:
El crecimiento real es igual a los logros sociales reales y valiosos y logros económicos sustentables, asociados a un familia real.
Posteriores investigaciones, que se realizaron en un lapso de diez años con muestras registradas en diferentes regiones y países de américa latina, sajona; y europa occidental demostraron una desviación en los resultados mas allá de los estándares calculados. Inicialmente los científicos infirieron un error en la expresión lógica del producto “Familia real”, mas tarde se inclinaron a dudar sobre la relevancia de términos como “valores humanos” y “ logros espirituales”, afirmando que estos términos de escaso valor numérico, en muchos casos se tornaban en un inconveniente para lograr los niveles de éxito esperado y de allí que la desviación escapase a los estándares. Pero al eliminarlos descubrieron que automáticamente se anulaban los términos FAMILIA REAL, LOGROS SOCIALES REALES Y VALIOSOS, Y LOGROS ECONÓMICOS SUSTENTABLES; los cuales sin duda son claves en la formulación de esta teoría.
Finalmente un científico, cuya identidad no trascendió, descubrió que el problema no estaba en la formulación o en la relevancia de los términos sino en el valor psicológico otorgado a ellos por los propios científicos. En palabras del científico:
“La empresa que nos ocupa como matemáticos tiene su origen en las ciencias humanas y no abstractas, por lo tanto no debemos olvidar que la obtención de productos como: Familia real, logros Sociales Reales y valiosos, así como logros económicos Sustentables; no puede darse solo como la interacción de términos individuales con origen en la propia individualidad sino como la concepción de estos mismos términos dentro de la gran malla de acciones que se suceden en lo cotidiano como producto de lo histórico, lo presente y en vista de las acciones futuras dentro de una sociedad y con inseparable vinculación del resto de las sociedades actuantes en la sociedad mundial”
Cuando finalizó su exposición, todos boquiabiertos preguntaron: ¿Profesor, cómo quedaría la ecuación?, ¿Es posible su reformulación?
A lo cuál el profesor, del cual ni siquiera vimos su rostro respondió:
-S, es posible mediante la constante M.
¿qué significa esa constante?
- Es la constante Mutatis-Mutandis, señores. Surge como el resultado de un algoritmo que reúne todos los sucesos humanos acaecidos desde que la civilización tuvo su origen, teniendo en cuenta todos los hechos sociales relevantes, desde las poblaciones nómades hasta las grandes urbes, todos los índices ( desempleo, migración, subocupación, pobreza, exclusión, etc). Las teorías psicológicas, sociológicas, antropológicas, antroposóficas y filosóficas de toda índole. Reúne la ciencia desde su origen, pasando por la alquimia hasta los grandes descubrimientos de la era moderna; la cultura, toda. En fín esta constante es el extracto, la esencia, el jugo mismo de la lógica de las lógicas, que da origen a cualquier pensamiento humano considerando a este pensar como el originario de todas la acciones antrópicas.
-Seguro que al leer esto sientes lo mismo que yo en ese momento. Se me heló el corazón...
cuando aún no nos habíamos repuesto y no podíamos tomar dimensión de lo que teníamos entre nuestras manos, el Profesor asomó su mano por entre los pliegues de cortina negra que resguardaban su identidad y exhibió las fórmulas terminadas.
Todos queríamos conocer ese último término, ese valor que resume lo que cada uno de nosotros somos. ¿Quién no quisiera saber?, ¿a quien no despertaría de la siesta saber que la fórmula de la felicidad fue descubierta y es tan sencillo entenderla y aplicarla?.
“0”
- Si, así es... solo un gran cero. El silencio duró siglos, y fueron solo segundos. Las miradas se cruzaron entre todos como rayos láser.
El profesor finalmente habló: Si señores. Ese fue el gran hallazgo, revisado una y otra vez durante años. El resultado de la combinación de todos los factores humanos históricos; es el elemento absorbente cero, la nada.
Luego de convencerme que no había forma de que el resultado de la constante fuese otro, solo vino a mi mente una cosa: “Oriente”. Las civilizaciones orientales siempre han dado un valor central, hasta nuestras épocas al vacío, al punto de creerlo el origen de todo lo que es. Así fue como embarqué hacia la india. Allí recorrí kilómetros y kilómetros de bosque, conocí a grandes maestros, a todos ellos enseñe y expliqué las fórmulas y mi constante M. Lo curioso fue que lo único que obtuve de cada uno fue una directa y penetrante mirada a los ojos.
Un día Conocí a otro maestro con el que pasé algo así como tres meses, el era un líder muy particular, se rehusaba a hablar conmigo pero insistía a sus discípulos con que yo debía quedarme en el templo y ellos para complacerlo me custodiaban día y noche. Al principio me sentí muy incómodo, asediado, pero las reiteradas miradas del maestro me generaban una gran expectativa. Me preguntaba ¿qué querría el de mi?. Pasaron dos meses y un día mientras rezaba za- zen un monje se acercó a mí, se reverenció ante mí, se inclinó, se arrodilló. Luego se paró y me pidió que lo siga con un suave movimiento de su brazo y su cabeza el cual acompañó con ojos entreabiertos. Me llevaba al templo sagrado del gran maestro, finalmente me senté frente a una imagen de buda. Luego de media hora el maestro apareció de repente en frente de mí, me miró a los ojos durante una hora y luego, simplemente los cerró.
El monje se acercó a mí y me señaló la salida, a la salida me entregó mis pertenencias y me señaló el bosque. Simplemente me fui...
- Nadie entendía nada. Las caras de desconcierto se multiplicaban por miles. El asombro se mezclaba en el aire con una gran desilusión en forma de elemento absorbente. El misterio era tan grande que temíamos preguntar, pero a mí me ganó la ansiedad y le pregunté:
- ¿Profesor... entonces, para que le sirvió su viaje a la india?
Me miró con una sonrisa casi maternal. Y dijo: Para nada, para eso sirvió. La sabiduría no tiene utilidad, ella es la utilidad misma.
-¿veo... pero sigo sin entender? Todos me miraban, podía sentir su deseo en mi nuca, ellos decían: ¡seguí!, ¡preguntá!, ¡queremos saber!.
¿qué pasa entonces con la fórmula y la constante?
- ¿eres acaso el único interesado?, dijo con panorámica a todos los presentes.
- Todo el mundo comenzó a murmurar, pero nadie contestó.
- El profesor me dijo: Ven aquí muchacho, acércate.
- Me acerqué y me repitió: Lo que descubrí en oriente es que no había nada que descubrir, la fórmula sirve y la constante es correcta, la matemática es honesta y nos enseñó a nosotros que nuestra naturaleza es la vida misma y cuando intentas definirla o establecer la mejor forma de vivirla o como sacarle provecho al máximo terminas por vaciar su significado, siendo este absorbido por si mismo para resguardarse, de quien intenta querer saber de antemano con total seguridad y precisión astronómica como sortear los avatares que aún no le han sucedido. Lo que digo es: la vida se vive día a día primero, después se piensa en el mañana y el pasado no es mas que un elemento de contraste, una herramienta para nuestro presente y nuestro futuro.
-Entiendo... ¿pero usted dijo que las fórmulas eran correctas?
-asi és... Dentro de su correcta proporción. Las fórmulas de más arriba nos servirán a lo largo de nuestra vida para dar lo mejor de nosotros mismos como seres humanos y estar mas cerca de lo que queremos y debemos ser. No existe la “fórmula de la felicidad”, solo podemos trazar un camino y estar atentos hacia donde doblamos en cada cruce, teniendo la precaución de no ir demasiado rápido y perdernos las señales o gastar mas energía de la debida...
En definitiva el equilibrio es el vacio. Cuando los excesos reinen una dosis de vacio, la sustracción, equilibrará la situación y cuando lo precario o faltante se adueñe de las circunstancias será el vacio quien aumente, vaciarse de expectativas innecesarias, de deseos futiles y vanales hasta que el equilibrio retorne.
Este concepto es el que debes aplicar a las fórmulas, esta es la constante M, la constante del cambio y la mutación, debes multiplicarla por cada término en la fórmula, cada vez. No lo olvides jamás: utiliza el vacio como la constante de requilibración en cada circunstancia de tu vida que mantendrá la igualdad de los términos. Ten siempre presente las reglas matemáticas: Todas las variables son interdependientes, la dimensión que una tome, reportará cambios proporcionales en el resto de las variables presentes, entonces si te preocupas demasiado por dimensionar notablemente una sola de ellas, las restantes comenzarán a parecer irrelevantes llegando en ultimo termino a ser descartadas por no producir cambios significativos a la ecuación o representar un “estímulo nulo” en su transferencia al contexto social. Siempre es posible el pasaje de términos en una igualdad, pero no olvides que los signos se invierten, que lo que en un término multiplica en el otro divide y lo que sumaba, restará. De la misma forma una ecuación plagada de sustracciones y divisiones puede ser compensada a través del pasaje de términos. Fuera de las operaciones básicas debe evitarse, entre algunas otras operaciones complejas la utilización de exponentes ya que estos producen cambios extremos en las dimensiones de las variables, pueden llevarlas tanto a un crecimiento enorme como a una disminución a punto de desaparición con solo cambiar su signo. ej: (10150 ;10–150). Y finalmente todas las operaciones complejas pueden ser reducidas a las cuatro operaciones básicas.
- ¿ y cuál es el equilibrio profesor?
-El vacio...
-¿cómo sería?
El movimiento es vacío de quietud. El equilibrio es dinámico, vacío de pasividad.
Ahora conoces todas las palabras. VE y descubre los significados...
“Cuando los oídos del alumno están preparados llega la voz del maestro que ha de enseñarle”
Lao Tse.
