INTRO MUSICAL

domingo, 1 de diciembre de 2024

EL ÚLTIMO POEMA

Hoy mientras intentaba agotar mis demonios a fuerza de pasos presurosos y música fuerte, tomé una decisión radical o mejor dicho una decisión me tomó radicalmente a mí con la fuerza de un insight
gracias al aroma de un biscochuelo casero que interceptó mí furiosa marcha.

 Ese dulce y hogareño aroma en la fresca y soleada tarde de domingo después de la tormenta, me confronto con mí furia y me recordó la repetición en mi historia.

  Ya han sido suficientes poemas de desamor. He aquí el rizoma, la línea de fuga: 

No volveré jamás a dedicar nuevamente una sola estrofa a la desdicha, al desencuentro, al sentimiento de abandono. Me resisto. No volveré a juzgarme por el desinterés de un otro, no volverá mí espíritu a la congoja por haber apostado a una causa pérdida. 

   Mí próximo poema será de amor, de un amor pleno, realizado, presente y valiente. Será un poema de encuentro o no verá este mundo otra obra de mí parte a no ser mí propio epitafio.

 Escribo porque amo, y porque amo caigo en el desamor. Entonces no levantaré más monolitos en honor la falta. Ya han sido suficientes.

LO DEJÉ TODO O NUNCA FUIMOS DOS

Deje de cocinarte y no extrañaste mis aromas. Dejé de invitarte a casa, y no buscaste regresar. Después
deje de ser el que invita en nuestras salidas y no recibí ninguna invitación tuya.
Deje de hacerte propuestas en escenarios que solo yo pensaba para compartir juntos y no escuché ninguna idea de tu parte. 
Un día deje de buscarte, no volví a iniciar una conversación y no recibí ningun mensaje... 

Finalmente deje de hacer publicaciones y subir historias para que las veas y no me olvides, 
deje de escribirte poemas y canciones para tratar de olvidarte, para drenarme de vos y
deje de ver tus historias para recordarte.

Por último dejé de sostener tu imagen en mí mente para sentir alguna esperanza.
Y un día finalmente, dejaré de pensarte.

TRECE CRUCES PARA OLVIDARTE



Hay que ser valiente 
y un poco loco,
para abrir el corazón 
y dárselo a alguien
Dijo Bukowski.

Entre silencios
privados y públicos, 
Públicos y privados 
Se diluyo
 Un incipiente 
nosotros

Tierna y lisergica
fábula 
Que solo 
los brillosos y
Tímidos ojos 
de un pequeño 
y suave monito
pueden hacerte
Soñar 

Fui el primero
Y el único 
En darte
Flores dijiste,

Y esa 
primavera
Fue 
nuestro otoño

Quizás
Por eso la
Vida irónica
Pero siempre
pragmática
Me puso
a dedicarte 
Cruces-epitafio 

Trece cruces
En la pared, 
Trece cruces
Para olvidarte

Y Al final 
Del viacrucis,
Frente  
Al sepulcro
deseo
nada tuviste
para ofrecer 
Al ritual.

Ni siquiera
 el último 
adiós

Entonces yo,
Una vez más,
Por última vez
Lo hago 
por los dos:


Fuiste viento.
 brisa fresca, 
Luego
cálido arruyo
Y finalmente 
 Un vendaval

Mí última voluntad:

Escoge una noche 
Fresca y Sonora 
De esas donde
Los árboles suenan
cómo si fueran
Miles
De atrapa sueños 

Y por el balcón 
Del pasaje 
Arroja
 Esos 
 últimos petalos
De mí deshojado
 anhelo
Que dejé 
Escondidos
 entre 
Gaviotas 
sedientas 
De libertad 

Déjalos volar
En silencio...

 Como yo a ti

"supera el espacio, y nos quedará sólo un Aquí. Supera el tiempo, y nos quedará sólo un Ahora. Y entre el Aquí y el Ahora, ¿no crees que podremos volver a vernos un par de veces?"
                      Juan Salvador Gaviota 



Safe Creative